¿En dónde está la Nube de Siigo?

Si llegaste a este artículo lo primero que debes saber es que la nube es un nombre que se le da al lugar en el que se guardan archivos electrónicos, tales como música, texto, imágenes, etc., utilizando servidores de internet, que existen físicamente, pero al que los usuarios no tienen acceso directamente como en el caso de un computador o una memoria USB, sino al que ingresan a través de un portal en la red. Este es el caso de la nube de Siigo.

Ubicación física de los archivos

A pesar de que como usuario no tengas acceso a los dispositivos materiales dentro de los cuales se aloja la información, esto no quiere decir que no existan. Lo que sucede es que estos mecanismos son servidores de grandes proporciones, que son propiedad de empresas especializadas prestadoras del servicio, como por ejemplo Microsoft.

Entonces, lo que los usuarios hacemos al acceder a una plataforma en la nube en la que tenemos una cuenta creada especialmente para nuestro uso personal y privado, es disponer del espacio que estos servidores nos suministran.

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El ejemplo más común de plataformas en la nube es la del correo electrónico, que hoy en día la mayoría de personas con acceso a internet tienen para enviar y recibir información; con este mecanismo es posible, además de compartir archivos, guardarlos y luego buscarlos fácilmente para reutilizarlos si se desea.

Por lo cual, los archivos no están fragmentados en el aire o alojados en las nubes, hipótesis que muchas personas llegan a creer al hablar de esta tecnología, sino que los datos están alojados en ciertos espacios físicos y viajan a la velocidad de la luz hacia nuestros dispositivos electrónicos, celulares, portátiles o tabletas para que los podamos manipular.

La nube de Siigo

Los servicios de software que ofrece Siigo en la nube utilizan los servidores que ofrece Microsoft Azure, empresa que ha sido calificada como la más confiable de este tipo por las instituciones gubernamentales de Estados Unidos por garantizar la propiedad intelectual de sus usuarios, y por consiguiente, a sus clientes, como por ejemplo los de Siigo.

Estos servidores se encuentran distribuidos en 14 puntos geográficos diferentes alrededor del mundo y todos funcionan como una red de copias de los demás, es decir que, si en un caso extremo uno de estos sufre algún daño, otro respondería por esa información de manera inmediata desde una ubicación distinta sin que eso afecte el desempeño de las plataformas y la información allí sembrada.

Ventajas de un software en la nube

El primer beneficio de un software en la nube es el más obvio: al utilizar un programa en la nube se elimina la necesidad de instalarlo en un equipo. Atributo que permite ahorrar tiempo, espacio y dinero, así como optimizar tareas que antes requerían de mayor atención por parte de los usuarios.

El ahorro del tiempo comienza desde el momento de la adquisición del software en la nube porque no se debe esperar la visita de un técnico o un ingeniero que haga la instalación en los equipos y se asegure de que funcionen antes de empezar a ser utilizados por los colaboradores de la empresa.

Además, se ahorra tiempo también en la cotidianidad si tenemos en cuenta que se puede acceder al software en la nube desde cualquier dispositivo conectado a internet, desde cualquier lugar del mundo, así que no debes ni siquiera preocuparte por cargar un computador portátil ya que puedes trabajar de la misma forma desde un celular.

Lo cual brinda la posibilidad incluso de irse de vacaciones sin dejar de monitorear los movimientos del negocio en cuestión o poder responder a las solicitudes de los clientes o a las necesidades de los empleados de una empresa en el momento que se necesite, no solamente desde la oficina.

Por otro lado, al implementar un software en la nube para administrar un emprendimiento se ahorra espacio físico, ya que no se deben almacenar copias de la información en CD físicos ni gastar dinero en ello.

Como tampoco se debe destinar espacio en la memoria de los computadores de la empresa, aspecto que lógicamente era necesario con los programas instalables, pues además demandaban cierta cantidad de gigabytes, memoria RAM y tipo de procesador para funcionar.

Lo que adicionalmente permite que los computadores de la oficina o el establecimiento comercial se prendan más rápido y trabajen eficientemente, pues no tienen albergados en si mismos todos los datos del programa y la información de la empresa organizada dentro de este.

Finalmente, la manera de adquirir un software en la nube es diferente a los de instalación local, pues el pago del servicio se hace de manera mensual o anual, dependiendo de la empresa, y se hace de acuerdo con las funcionalidades que el empresario desee o necesite tomar; a diferencia de los programas convencionales para los cuales se debe pagar una licencia vitalicia por cada computador en el que se vaya a usar, de modo que la inversión se multiplica exponencialmente.

“Internet es mucho más que una tecnología, es un medio de comunicación, de interacción y de organización social” – Manuel Castells

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